Llevo semanas que, a raíz de la situación de los refugiados me viene insistentemente este cuento a la cabeza. Después de lo del viernes, más aún. Un ser humano que sufre es igual a otro ser humano que sufre. Aunque no lo entendamos. No lo olvidemos.
Un hombre estaba en un cementerio poniendo flores en la tumba de su esposa, cuando vio a un hombre chino poniendo un plato con arroz en la tumba vecina.
El vecino se dirigió al hombre chino y le preguntó:
– Disculpe señor, ¿de verdad cree usted que el difunto vendrá a comer el arroz…?
Y el chino respondió -«Sí, cuando el suyo venga a oler sus flores …»
Moraleja: Respetar las opiniones del otro, es una de las mayores virtudes del ser humano.
Marcianadas nocturnas 
Y saber ponerse en la piel del otro, nos ayuda a entenderle mejor. Besos
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A veces parece difícil empatizar, pero el respeto es básico, incluso aunque a veces no terminemos de entendernos. Un abrazo!
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La empatia es unos de las cualidades que más hace falta en las personas. Algo tan fácil como ponerse en el lugar del otro es tan difícil de llevar a cabo…
Un millón de sonrisas 😀
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Soy partidaria de que todo se puede aprender y entrenar. Sólo hacen falta ganas. Un abrazo sonriente!
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Muy , muy buena reflexión…gracias.
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Es un cuento sencillo y por eso trato de tenerlo presente, aunque a veces sea difícil…
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La empatía la he «denunciado» tantas veces en mi blog que dudo que haya un porcentaje considerable de gente capaz de ponerla en práctica… Seguiremos esperando. Besicos empáticos
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Es muy poco común, la verdad. Además la confundimos con ponernos en el lugar del otro cuando pensamos parecido, siendo que eso no tiene mérito, lo difícil es ser empático cuando no coincides en la perspectiva… Besicos comprensivos!
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El etnocentrismo….creer que nuestra cultura es superior al resto. Y juzgar las demás desde nuestra perspectiva. Nada nos hace más daño como seres humanos.
Un beso!
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Muy bien explicado Natalia, además pasa con la cultura pero también con otras características, desde la edad a la forma de vestir. Lo normal es lo de cada uno, y de ahí el resto es mejor o peor. Nos encanta hacer escalas imaginarias. Lástima. Un abrazo en perspectiva!
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Escalas, jerarquías, etiquetas……vaya panda de «humanos»!!
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Tu cuento me recordó una anecdota…Estaba en una tieneda china , un señor a mi lado exclamó – ¡ Vaya, por Dios … esos chinos todos son iguales, no hay manera de distingirles! » Seguramente que ellos lo mismo piensan de nosotros. «…. le contesté. » ¡ Que va ! Somos muy diferentes.»
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Qué cierto, ese es uno de los tópicos más extendidos… resulta que tengo una sobrina china, y no se parece a ninguna otra niña china que conozca. Pero los estereotipos nos facilitan tanto la vida que es difícil evitarlos a veces…
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