Deberes de lunes. Semana 7.

Esta semana ha sido fea. El flemón, el lado oscuro que me ha tocado digerir, y las noticias me han llevado de calle.
No consigo dejar de llorar con cada caso de violencia machista, no entiendo que dejemos a los sirios a la deriva como si no fuesen humanos, hermanos. Me duele cada muerto en París, pero también las víctimas de cualquier acto violento, que por ser en nombre de dioses distintos parecen de primera o segunda categoría.
Me enerva que la gente se crea en posesión de la verdad absoluta y me hace hervir de rabia la gente que se cree con potestad para saltarse normas básicas de respeto. Al margen de que esta ha sido una semana dura y de mucha reflexión, de intentar asumir que el mundo es así, y terminar asumiendo que no puedo asumirlo sin pelear, he tenido momentos buenos, divertidos, momentos compartidos y gente alrededor que ha puesto algo de luz a mi vida. Ahí van mis deberes:

– El viernes tenía una reunión muy importante, me correspondía a mi dirigirla y había mucha tensión que controlar entre algunas personas. Horas antes me di cuenta de que no había reservado la sala de reuniones, y entré en pánico. Llevaba toda la semana algo gris y cosas cotidianas me iban fallando, estaba más despistada de lo normal, y el mail de reserva se quedó en la bandeja de salida. Llamé a una compañera, sólo por compartir mi sensación de marrón a punto de explotar en mi cara y me convenció de que tenía solución: un  desayuno antes de la reunión, que iba a ser un desastre y al final llevé muy dignamente. ¡Y con su sala, su ordenador y su todo!
– Salir hasta las cuatro, levantarme sin reloj, desayucomer y merencenar… todo eso, sin tener ganas de fiesta. Salí por compromiso, y la verdad es que no fue una gran noche, pero me gustó todo lo demás. Dormir ocho horas del tirón, levantarme sin prisa, sin reloj, comer a deshoras, domingo de sofá, manta y peli. La vida a cámara lenta, para variar.
– Y mi tercer gran momento semanal, me hace muchísima ilusión. Es una tontería pero… Me ha tocado una camiseta! A mí, que nunca nunca me toca nada! A mí, que gasto toda la suerte del mes en aparcar, que se me olvida comprobar si mis boletos están premiados y que cuando fui a comprar para el 11/11 ya era día 13. Ahora sólo tengo que encontrar el rato libre para ir a por mi premio.
También esta semana he sentido algo importante, y es que esto del blog, que es una marcianada, que me sirve como rincón escondido en mi alma, donde suelto mis luces y mis sombras, sin que la gente con quien me cruzo por la calle, con quienes trabajo o tomo un café sepan llegar a él, ha ido tomando vida. He notado que hay gente ahí, al otro lado, y me siento muy agradecida. Tengo pendiente ponerme al día con muchas cosas, leer posts, buscar sobre algunos artistas,… y no quiero perderme nada, pero resulta complicado encajar mis tiempos libres. Aún así, esta «cafetería virtual» me parece un gran sitio para venir a descansar, disfrutar, pasear por vuestras páginas. Y por eso quiero dar las gracias a quienes pasan por aquí y leen mis marcianadas, pero también, más aún, por escribir otras que me aportan visiones distintas, relatos o formas de vida que siempre enriquecen.
Buenas noches, y feliz semana.

image

16 comentarios en “Deberes de lunes. Semana 7.

  1. Me he sentido muy identificada con la última parte del texto. Saber que hay alguien ahí que te lee detrás de una pantalla y te dedica unos minutos de su tiempo es realmente genial. Y por un momento, ves un poco de color entre estos días tan tan grises que estamos viviendo todos.
    Además de los problemas que llevemos en la mochila cada uno de nosotros.
    Sigue escribiendo y compartiendo con nosotros todo lo que pienses, que siempre te dedicaremos un rato de nuestro tiempo 🙂

    Le gusta a 1 persona

  2. Gracias a ti por compartirnos tus marcianadas y hacernos un poco ñas extraterrestres. Nos viene bien, este mundo terrestre está poniéndose que da pena… Un placer dedicarte mi tiempo y saber qué discurre por tu cabeza, por tu corazón, por tus manos. Besicos msrcianos

    Le gusta a 1 persona

  3. En esta entrada, reflejas perfectamente lo que es la vida. Has conseguido ver el lado positivo entre tanto horror, entre tanto desenfreno laboral….por eso eres grande, marciana.
    Yo me siento muy reconfortada visitándote, recibiendo tus visitas. Y pienso seguir estando ahí, que lo sepas.
    Un beso grande!

    Le gusta a 1 persona

    1. Qué ilusión, muchas gracias por tus palabras! No es ser grande, creo que se trata de mantener los ojos abiertos, ahí está todo, cosas buenas y no tanto, gente buena y no tanto,… la clave supongo que está en vivirlo todo y no rehuir nada. Eso, al menos, intento yo. Egoísmo vital, le llamo. No quiero perderme nada, jeje. Un abrazo, y gracias por la amenaza!

      Le gusta a 1 persona

  4. Gracias a ti Sil por compartir tu día a día, puede parecer una tontería pero nos sirve para evadirnos por un momento de nuestras vidas, para conocer otras personas iguales a nosotros y para comprendernos de alguna manera. Yo seguiré viniendo cada día a leerte. ¡Un abrazo grandiosisisímo!

    Le gusta a 1 persona

  5. Cada uno tiene el tiempo que dispone. A mi se me van las horas aquí y por eso mismo hay días que me es imposible meterme y tengo que volver atrás para verlo todo.
    Recuerdo uno de tus primeros comentarios diciéndome que nadie de tu alrededor conocía esto y me alegra saber que te sientes acogida aquí y sea como tomar café entre amigos 🙂

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario